En general, se entiende por presión arterial la presión de los vasos sanguíneos. Para que la sangre llegue a todos los órganos, el corazón tiene que bombear sangre con una presión determinada para que pueda mantener la circulación en todo el cuerpo. La presión arterial se suele medir en mmHg (milímetros de mercurio)
y sus valores vienen dados por la fuerza del corazón, la resistencia en las arterias, la cantidad de sangre y por otros sistemas de regulación.
Valor sistólico y diastólico
Se entiende por sístole (el valor mçs alto de la medición) la presión dentro de los vasos cuando el corazón se contrae y bombea la sangre por todo el cuerpo. El valor "diastólico", más bajo, también llamado diçstole, es la presión cuando el corazón se relaja.
Una presión sistólica superior a 140 mmHg o una presión diastólica superior a 90 mmHg se consideran hipertensión, también conocida como hipertonía. En adultos, el valor ideal en reposo es de 120 a 80 mmHg.
Las fluctuaciones de la presión sanguínea son normales. Incluso con una medición repetida, pueden producirse diferencias considerables entre los valores medidos. Por lo tanto, las mediciones únicas o irregulares no proporcionan información fiable sobre la presión sanguínea real. Una evaluación fiable sólo es posible si se realizan mediciones regulares en condiciones comparables.