8 Consejos de motivación para mantener tus buenos propósitos a largo plazo

¿Cuántas veces nos hemos propuesto comer más saludable, hacer más ejercicio o finalmente dejar de fumar, solo para volver a caer en viejos hábitos después de poco tiempo? No es de extrañar que las inscripciones y visitas a los gimnasios aumenten cada año a principios de enero, solo para disminuir nuevamente a lo largo del mes.

Pero, ¿por qué nos cuesta tanto motivarnos y no logramos alcanzar nuestras metas? Una delas razones es que simplemente nos proponemos demasiado. No es realista cambiar toda tu vida de un día para otro.

Otro problema es que muchas de nuestras metas están formuladas de manera imprecisa. ¿Qué significa comer más saludable? Para algunos, eso puede significar simplemente renunciar a la barra de chocolate diaria, mientras que otros quieren cambiar radicalmente su dieta. Ir regularmente al gimnasio puede significar para personas activas planear 2 sesiones de entrenamiento más, mientras que para otros, correr media hora una vez a la semana ya sería un logro.

Te mostramos cómo, con algunos trucos simples, puedes llevar a cabo con éxito tus propósitos y metas.

8 Consejos para alcanzar tus metas

Establece metas claras y realistas

Una de las principales razones por las que los propósitos a menudo fracasan es la imposibilidad de integrar las metas en la vida diaria. Sé realista al planificar y piensa en cómo puedes incorporar tus nuevos hábitos en tu rutina diaria. El primer paso para tener éxito con tus propósitos es formular tus metas de manera clara y realista. En lugar de formulaciones vagas como "hacer más ejercicio", establece metas concretas y medibles, por ejemplo, "correr 30 minutos tres veces a la semana". Esto crea pautas claras que te ayudan a mantenerte enfocado.
Da pequeños pasos

Los grandes cambios a menudo pueden parecer abrumadores. Divide tus metas en pasos pequeños y alcanzables. Si, por ejemplo, planeas comer más saludable, comienza por integrar una porción extra de verduras cada día. Si quieres correr un maratón, empieza con distancias cortas y aumenta gradualmente. Los pequeños logros motivan y facilitan el camino hacia metas más grandes.
Encuentra motivación

Descubre qué es lo que realmente te motiva. Ya sea un estilo de vida más saludable, más energía en el día a día o simplemente la sensación de hacer algo bueno por ti mismo. La motivación te ayuda a seguir adelante incluso en momentos difíciles.
Comparte tus metas

Comparte tus propósitos con amigos y familia. Al comunicar tus metas, no solo creas un cierto compromiso, sino también un entorno de apoyo. Los amigos pueden alentarte y motivarte cuando las cosas se ponen difíciles.
Encuentra un compañero

Todo es más divertido cuando se comparte con alguien más. Busca un compañero o compañera que tenga los mismos propósitos que tú. Juntos pueden motivarse y apoyarse mutuamente. No solo es más divertido, sino que también aumenta la probabilidad de que alcancen sus metas juntos.
Visualiza tus metas y logros

Es mejor que formular tus metas solo mentalmente escribirlas o visualizarlas. Cuélgalas, por ejemplo, en tu nevera o en tu tablero de notas, así tendrás tus metas a la vista todos los días. También deberías documentar tus logros, eso proporciona un impulso adicional de motivación.
Acepta los contratiempos y ten paciencia

Nadie es perfecto, y es completamente normal que haya contratiempos. Acepta que a veces las cosas no salen como planeaste. Lo importante es aprender de estas experiencias y seguir adelante, en lugar de desanimarte. Los cambios toman tiempo. No alcanzarás todas tus metas de la noche a la mañana. Ten paciencia contigo mismo y celebra también el camino, no solo el objetivo.
Recompénsate

Cada progreso, por pequeño que sea, merece reconocimiento. Establece metas intermedias como hitos y recompénsate cuando las alcances. Pueden ser cosas pequeñas como un baño relajante, un buen libro o una visita a una cafetería. Las recompensas fortalecen el sistema de retroalimentación positiva de tu cerebro y te motivan a seguir adelante.